A 3 meses del 7 de octubre
“Bajo el Manto de la Historia: Una Llama Inquebrantable ante el Antisemitismo”
A lo largo de los milenios, la epopeya del pueblo judío ha sido un relato impregnado de desafíos y resiliencia, enfrentándose a las tinieblas del antisemitismo con una valentía indomable. En este 7 de octubre, no solo recordamos las batallas acontecida, sino también la luz interior que persiste a pesar de transitar uno de los momentos mas oscuros . Nacio en nuestro pueblo una luz que desafía incluso las sombras más densas.
Cada capítulo de discriminación no ha hecho más que avivar la llama intrínseca. La sensación de no ser aceptados se ha transformado en la fuerza que enciende nuestra resiliencia. En lugar de permitir que el odio apague nuestra luz, hemos convertido cada desafío en una oportunidad para irradiar con mayor intensidad.
Este 7 de octubre no es simplemente una fecha en el calendario; es un recordatorio de la luz intrínseca que llevamos. Nuestra identidad, lejos de ser eclipsada por el antisemitismo, resplandece con valores arraigados en la compasión, la justicia y el amor. Cada acto de discriminación ha sido contrarrestado con un acto de humanidad, y cada sombra ha sido disipada por la luz inextinguible de nuestra compasión.
En nuestra travesía a través de los siglos, cada desafío ha esculpido la narrativa de un pueblo que se niega a ser eclipsado. Recordemos que cada uno de nosotros carga con la responsabilidad de ser faros en la oscuridad. La historia judía nos ha otorgado una luz única y preciosa, y en este 7 de octubre, renovamos nuestro compromiso de iluminar incluso los rincones más oscuros con la resistente luminosidad de nuestra identidad.
Este recordatorio no es solo para la reflexión, sino para la acción. Que cada uno de nosotros, al recibir la luz de nuestra historia, se convierta en un artífice activo de cambio. Desafiemos la intolerancia con comprensión, construyamos puentes de entendimiento en lugar de erigir muros de separación y elijamos la esperanza como brújula en medio de la oscuridad.
En lugar de un simple llamado, que esta luz sea nuestro faro hacia un mundo donde la tolerancia y la diversidad sean las estrellas que iluminen nuestro destino, recordándonos que en la unidad de las diferencias, encontramos la verdadera fuerza de nuestro pueblo .Que así, con cada paso, construyamos un camino iluminado por la comprensión y la aceptación, forjando un mañana donde cada alma brille con su auténtica luz.
